“No soy católica pero quiero mucho a la Divina Pastora” así comenzó la conversación que tuve con Keyla María. “Creo en Dios PadreTodopoderoso pero no soy católica”.
“Un día fui a visitar a mi hijo y de camino vi una imagen de la Divina Pastora , yo estaba muy triste pero justo me paré detrás de esa imagen y sentí una brisa y una presencia de Dios inexplicable, me sentí muy llena de paz, yo solo miraba la imagen y le agradecía a Dios por ese sentimiento.
Y mientras la escultura me hacía sombra, comencé a recordar a todas esas personas que sí le tienen devoción y cómo allí está el amor de Dios”, dijo Keyla muy emocionada.
La VIRGEN es un camino directo a Dios
Al pensar que año tras año más de 2 millones 700 mil personas se reúnen para caminar junto a la Virgen María en la advocación de la Divina Pastora, escuchar sus historias, ver como cumplen promesas, le rinden homenaje y por sobretodas las cosas se puede sentir amor y mucha paz. No me caben dudas de que la Virgen María nos toma de la mano y nos lleva a Dios.
Hay algo que mueve, que además parece inexplicable, y lleva a tanta gente a pedirle (por la salud a un familiar, por un favor, un trabajo, una conversión) viajar de una ciudad a otra, dedicar meses a la preparación de su fiesta…
Esta es la tercera procesión más grande en todo el mundo y pasa cada año en Venezuela, su visita 166 comenzó el 14 de enero antes de la salida del sol desde la Iglesia de Santa Rosa y recorrió unos 7 kilómetros hasta llegar a la Catedral de Barquisimeto.
El mayor honor para cualquiera de sus devotos es hacer turno para cargarla al hombro o ser parte del cordón humano que la resguardará durante todo el recorrido.
Mi historia personal con la Divina Pastora
Ese día el chat con mi papá, que pudo ir, reventó con fotos y videos y en las historias de mi Instagram no paraba de aparecer la Divina Pastora. Conforme pasaba el día fui sintiendo cada vez más cerca y la verdad es que de alguna forma lo viví.
La toma desde arriba con un mar de gente, todos caminando hacia un mismo lugar, con un fin en común y estando a una con un cariño y una fe desbordantes, sólo me hizo pensar en la Iglesia y lo afortunada que soy de ser parte de ella.
Dentro de tantos devotos siempre está la persona que quiere al menos tocarla con la punta de los dedos o estar siquiera cerca de Ella el mayor tiempo posible. Ahora pienso: ¿así con ese afán trato yo de procurar estar a diario cerca de Ella?, ¿tengo esa misma fuerza de voluntad para cortar con mi flojera y no dejar el rosario para luego?
Madre que buena eres
De mi cabeza no salía: “Divina Pastora que buena eres”, cómo quieres y escuchas a tus hijos, al que está cerca de Dios y al que no tanto, al que cree en Ti y al que no, al que te reza y se acuerda de Ti a diario y al que sólo lo hace cada 14 de enero… a todos sin excepción los amas, proteges y llenas de paz.
Porque el amor de Nuestra Madre es infinito, Ella intercede ante Dios en la vida de tantos y tantos. Los favores, milagros y peticiones concebidas por la Divina Pastora son para escribir una enciclopedia entera.
Este año pude escuchar un par que aquí te cuento:
El hermanito que siempre quise
Soy Arian, desde pequeña viví en Barquisimeto y todos los años el 14 de enero, salía a las calles con mi familia para celebrar la procesión de la Divina Pastora. Recuerdo este día como uno de los más emocionantes y especiales desde que tengo memoria. Siempre me impresionaba ver que muchos iban descalzos, vestidos de nazarenos, de pastorcitos e incluso cargando grandes cruces de madera, cada quien le hacía promesas rogándole por algún favor.
Todo este ambiente influyó mucho en mí, hasta el punto de llegar a hacerle una promesa muy importante para mi vida, y la vida de mi familia, tan solo siendo una niña de 10 años. Recuerdo que tenía tiempo pidiéndole a mis padres tener un hermanito. Mi mamá me decía que ella ya era un poco mayor para concebir y que eso no era posible.
Yo sabía que la Virgen me escucharía si se lo pedía con todas mis fuerzas. Fue así como al ver que la imagen pasaba frente a mí por una de las calles, la miré intensamente y pensé: “Madre mía, Virgencita, quiero un hermanito, por favor”. A cambio le ofrecí no comer chocolate por un año entero (sacrificio claramente difícil para una niña de 10).
Para mi sorpresa, (o no, porque sabía que Ella lo haría posible) en menos de un mes mi mamá nos anunció a toda la familia que estaba embarazada. La alegría no cabía en mi corazón, en octubre nació mi hermanito, y estoy convencida de que fue un regalo de mi Madre, la Virgen. Hoy en día, 12 años después, sigo caminando la procesión con mucha devoción en agradecimiento por este gran milagro que cambió mi vida.
El hijo predilecto de la Pastora
Andrés Eduardo nació el 13 de enero de 2003 , prematuro y con deficiencias en sus pulmones, luego de un trabajo de parto traumático que lo dejó con poco oxígeno, por lo que requería con urgencia de una incubadora, ya que en la clínica donde nació no había, casi a la media noche lo trasladaron en ambulancia desde la Avenida Venezuela hasta una clínica en Cabudare, la cual contaba con atención neonatal; durante el trayecto Andrés sufrió un paro respiratorio justo pasando por la Redoma de Santa Rosa, y allí mismo volvió a la vida.
Llegó a la clínica en Cabudare para que le dieran los cuidados neonatales y el mismo 14 de enero lograr un cupo para Andrés en el hospital pediátrico Andrés Riera Zubillaga y fue trasladado hasta allí, donde permaneció en cuidados intensivos por 10 días y luego en cuidados intermedios por 11 días más.
Andrés fue dado de alta en febrero pesando 1.960 kg, y sus pulmones estaban restablecidos.
Fue bautizado el 26 de abril en el Santuario de Santa Rosa y siempre ha tenido una conexión hermosa con la imagen de la Divina Pastora. Para nosotros Andrés es hijo predilecto de nuestra Excelsa Madre y cada año celebramos el 13 y el 14 de enero el milagro de su vida❤
Qué buena y generosa eres Divina Pastora que te vales de esa fe que tienen tantos para acercarlos a Dios a través de tus intercesiones directas al Cielo. ¿Cómo nos amas tanto?, ¿qué clara está tu presencia en nuestras vidas y tu pase directo al Cielo?… a Dios. Qué tontos somos si no te pedimos más, si no te encomendamos nuestros deseos más profundos, si no aprovechamos a diario tomar de tu mano (siempre extendida para ayudar) y caminamos este camino contigo.
Muy bueno y emotivo por sus testimonios y llamado a tratar más a la Virgen
Muy bueno, te felicito
Muy bueno, te felicito
Muy bueno y emotivo por sus testimonios y llamado a tratar más a la Virgen