El primer día de Congreso comenzó con la celebración de la Santa Misa precedida por Mons. Jaime Spengler, arzobispo de Porto Alegre.
Durante la homilía nos dijo que Jesús nos llama a la amistad, a la intimidad; y nos invitó a que procuremos guiar nuestros pasos, elecciones y decisiones a través de la Palabra de Dios.
A las 10 de la mañana comenzó la primera conferencia donde el español, Juan Manuel Cotelo, actor, director y guionista nos habló de que como los cristianos no debemos ser personas cómodas sino aquellas atrevidas a preguntarse: ¿En qué lío estás metido?¿Qué te está pidiendo Dios?
El director de películas como “El mayor regalo” (2018) y la “Tierra de María” (2013) dijo, “Cuando juzgo al mundo, no estoy viendo con los ojos de Cristo. Cristo no me ve para juzgarme sino para darse a mi. Y si una persona se sintiera mirada con esa mirada pura y se sintiera amada, eso permitiría su propia resurrección”.
“Si creo que estoy poniendo demasiado empeño en mis fuerzas y mis capacidades, Él no puede actuar. El más pequeño es el más poderoso. Sé pequeño”, continuó Cotelo.
Luego de unos minutos de descanso, inició el conversatorio: “Heridas de la sociedad de hoy” dirigido por el dr. Rodrigo Guerra de México, secretario de la Pontificia Comisión para América Latina, licenciado Pabel Muñoz de Ecuador, alcalde metropolitano de Quito.
En horas de la tarde, cerramos el día con dos testimonios contados por sus protagonistas, primero fue el turno del ucraniano mons. Hryhoriy Komar, obispo auxiliar de Sambir, y la sra. Leyden Rovela, miembro de la Conferencia Epizcopal de Estados Unidos
La jornada terminó con el rezo del Padre Nuestro, seguido de un abrazo de paz.
Artículo escrito en colaboración con el Equipo IEC – Quito 2024