Y bueno, pensando en esta fecha decidí encontrar el verdadero significado en la fe detrás de un día como Halloween. ¿Es verdad que es completamente pagano?
La respuesta es: no. De ninguna manera, el Halloween tiene un origen completamente católico.
La Vigilia de todos los Santos
Y entonces, ¿cuál es el origen de Halloween? Su nombre viene del inglés, «All Hallows Eve», que significa la noche antes de todos los santos. Es decir, una vigilia en preparación para celebrar el gran día de todos los santos (All Hallows Day, hallows = santos).
Es una costumbre histórica tener vigilias previas a días de fiesta, como por ejemplo Noche Buena es la Vigilia de Navidad. Y esto lo hacían en Inglaterra los católicos, antes de la reformación.
El Día de Todos los Santos es celebrado en la Iglesia universal, es una gran fiesta en el calendario litúrgico, cuando celebramos a los santos que conocemos y también a aquellos que son santos, pero que todavía no veneramos en la Iglesia.
Tres celebraciones
El día de Halloween es el primero de tres días de celebración, el día de la Vigilia de Todos los Santos, que al mismo tiempo nos prepara para el Día de Todos los Santos (noviembre 1) y el Día de los Difuntos (noviembre 2).
¿No se habían preguntado antes por qué Halloween es los 31 de octubre? Y entonces es el tiempo del año en el que la Iglesia militante honra a los muertos en Cristo, los santos y las almas que se encuentran en el purgatorio. Estamos celebrando la comunión de los santos.
Las tradiciones de Halloween
¿Y por qué las tradiciones de Halloween? Bueno, muchas de las tradiciones de Halloween vienen de las distintas celebraciones europeas en estas fechas.
Los inmigrantes llevaron a EEUU sus tradiciones, y las calabazas iluminadas son de origen irlandés, los disfraces de origen francés, ir de casa en casa es inglés, quienes intercambiaban oraciones por las almas de seres queridos a cambio de pasteles. Es decir, las tradiciones actuales son el resultado de la mezcla cultural que ocurre en EEUU al ser un país de migrantes.
Acojamos a Halloween
Es tiempo de acoger a Halloween como la fiesta que es, la Vigilia de Todos los Santos, y a vivirla como tal. Es momento de celebrar a los Santos, a los Difuntos y tomar consciencia de que todos vamos a morir.
Y Halloween es la mejor excusa, justamente para esto, vemos calaveras y tumbas como decoración en casas, y podemos aprovechar esto para pensar en la muerte.
Así que, disfraza a tus hijos, toca las puertas de los vecinos pidiendo caramelos, decora tu casa con calaveras, solamente recuerda que esta vida es pasajera, y que nosotros, como los santos que celebraremos el primero de noviembre, estamos destinados para la vida eterna.
Recristianizar las fiestas
Pienso que es importante recordar que ha sido siempre parte de la labor evangelizadora el cristianizar muchas e importantes celebraciones paganas.
Ahora tenemos por delante una inmensa tarea para evitar que se desvirtuen o recuperar en la medida que se está perdiendo su verdadero sentido.
No tener miedo de festejarlas, pero haciéndolas más nuestras, dando ese toque evangelizador.
Con la seguridad de que todas las cosas son de Cristo (Rom 11, 36), que el demonio no es más fuerte y que con audacia y decisión le sacaremos de los espacios que haya podido ganar a la civilización cristiana.