Ahora sí es cierto. Empezamos a acercarnos a los últimos días de diciembre.
A muchos nos da por evaluarnos y vernos en resultados tangibles lo que hemos adquirido o ganado. ¿Cómo te sientes cuando en tu evaluación palpas que no está el resultado que tú querías? ¿En qué piensas?
A la mayoría de las personas les ocurre que se entristecen y sus pensamientos tienden a ser negativos y desmotivadores llegando algunos a la conclusión de saldo en contra.
Hoy te invito a que te examines con los pulmones llenos de aire y con una mirada positiva después de ver tus pasos en tres aspectos importantes de tu vida: Personal, Familiar y Profesional. Iniciamos:
Mirada Personal: Partiendo del principio antropológico que somos seres únicos, singulares e irrepetibles estamos dotados de regalos llamados dones o fortalezas con los que hemos nacido.
Esto es fácil de comprender cuando de manera natural y con poco esfuerzo te resultan sencillas algunas tareas que a otros le cuesten más trabajo. Estos dones y regalos que tenemos y nacen de nuestro ser interior hay que alimentarnos y trabajarlos de tal manera que siempre se conserven sanos y fortalecidos.
Si te examinas cómo has crecido en tu plano personal, qué querías mejorar cuando empezaba enero del 2019 y miras tu realidad actual podrás ver tus pasos concretos esto te va a dar ánimos y una gran sonrisa cuando veas que si te ha sido posible avanzar. Aquí entran las fortalezas para afianzar y los aspectos mejorables por sacar brillo. Temas como: ser puntual, cumplir lo prometido, tener detalles con
tus seres queridos, cuidar la prudencia, luchar contra la vanidad, en fin. Una Buena noticia: Tenemos toda la vida para mejorar nuestro plano personal. Lo importante es empezar.
Mirada Familiar: Dentro de la familia entran todos los que llevan nuestra misma sangre, los que viven en nuestra misma casa. La familia de origen, la familia extendida y la política si la tuvieras.
Todos entran ahí. Y también nuestros amigos. Mira los pasos que has dado con ellos, pon atención a quién por falta de orden has desatendido. Ilusiónate de ver los logros de tus hijos y de tu pareja. Agradece por tenerlos en tu vida.
Para que tu familia crezca en unión y fraternidad empieza por un modelo: en el campo familiar cuentan más las acciones o ejemplos que los sermones y reprendidas. Quieres que cambie él o ella, da tú el primer paso cambia la conducta en ti primero.
Mirada Profesional: Quien sueña es señal de estar vivo. Profesionalmente también estamos y somos seres con ilusiones. Mira cómo empezaste en 2019 y fíjate lo que has aprendido: seguro has crecido en paciencia, en capacidad de generar cambios o improvisar, en gestionar plan a, b o c.
Si quieres estudiar y las circunstancias no te lo han permitido te doy un dato: Hay miles de cursos y propuestas en línea en diferentes plataformas algunas muy económicas: date un tiempo y busca, seguro encuentras algo que te convenga.
Sé realista y escribe acciones de cumplimiento prácticos y aplicables que te lleven a generar lazos y pasos de crecimiento profesional que atraigan a otros.
Ten un espacio de silencio y estudia cuáles son las razones que te demoraron más o menos (según cada una) en llegar a cumplir ese propósito. Cada día tiene una luz nueva, permite que esa luz llegue a encenderse dentro de ti para que después tú enciendas a otros.