DISFRUTA LA VIDA
¿Cómo puedo disfrutar de la Vida? ¿Eso no es pecado? No para nada. Dios no nos creó para sufrir. Él quiere que disfrutemos de la vida. Nos lo dice en el Evangelio de hoy:
“yo he venido para que las ovejas tengan Vida, y la tengan en abundancia.»
Sí, la vida tiene propósito y significado. Dios, en su calidad de Padre amoroso, desea que obtengamos felicidad y gozo. Dios quiere que trabajemos y también descansemos. Que aprendamos a disfrutar de todo.
Hace poco subí en mi Instagram (@p.juancarlosv) Un momento que tuve con mis amigos, donde estuvimos en una casa juntos, escuchando música. Éramos tres, simplemente escuchando música. Yo disfruto la buena música entre amigos, disfruto del aroma de un buen café con los amigos, y por supuesto también disfruto de un buen vino. Disfruto de la mirada de un niño en cuanto hace su “primera comunión”, disfruto de un buen filete asado a las brazas, disfruto cuando todos los semáforos se me ponen en verde, disfruto de ver la Sangre de Cristo cada mañana, disfruto terminar la jornada cansado y satisfecho, y tantas cosas mas…
Y creo que Dios disfruta de vernos disfrutar. Dios quiere que tengamos vida en abundancia. Gracias Señor por ser un Padre tan buen. Por que también en ocaciones pasamos por situaciones difíciles, y tenemos que aprender a ver a Dios, también atra de eso. Dios quiere que vivíamos en abundancia, pero no en abundancia de cosas, como el que se llena de cosas materiales, o de dinero… NO. Dios quiere que tengamos el corazón lleno de Él.
Gracias Dios por ser un Padre tan bueno
Gracias Dios por ser un Padre tan bueno.
Nuestro omnipotente Dios reina sobre su creación. La ciencia y la naturaleza no se oponen a Dios porque él creó el universo y lo bendijo con su bondad. En inglés la frase “estar tan ocupado que se olvida oler las rosas” y se usa cuando las ocupaciones hacen que una persona no se detenga para apreciar lo bueno de este mundo. Te invito a detenerse un momento y que encuentres las huellas de la majestad de Dios a su alrededor. La grandeza de su creación nos llama a servirle y alabarle con todo nuestro ser. Porque Dios está presente en todo momento. Solamente tiene que abrir tus ojos y maravillarte ante el asombroso diseño del Dios bueno que reina, sobre todo.
Buscar las cosas de Dios a nuestro alrededor. El sentido de la vida es algo que nos persigue e interroga a todos. ¿Para qué vivo? ¿Qué quiero alcanzar en mi vida? ¿Unos buenos estudios? ¿Para qué? ¿Para conseguir un buen trabajo? ¿Con qué objetivo? ¿Cobrar mucho y poder comprarme mis caprichos, hacer viajes y tener una familia? ¿Y eso para qué? ¿No puedo hacer lo que quiero ahora mismo, sin conseguir todo eso? Entonces…Puedo hacer lo que quiero ¿Vivo para alcanzar el fin de semana y pasar un buen rato con mis amigos? ¿Para conocer a un chico o una chica? Pero… ¿Para qué? ¿Para pasar un buen rato? ¿Vivo solo para disfrutar? ¿Pero soy feliz así? ¿De verdad? Entonces… ¿Para qué vivo?
El Señor nos invita a ir por Él
Sino está Jesucristo en nuestro corazón, si el no hace de buen pastor, entonces intenten taremos buscar en todos estos suplementos la verdadera felicidad y nos encontraremos siempre con el corazón vacío.
En cambio, cuando encontramos a Cristo encontramos sentido. Pero también encuentra sentido, también las cosas que no entendemos, el sufrimiento, y las cosas que no nos gustan.
El Señor nos invita a ir por Él. Yo soy la puerta. El que entra por mí se salvará; podrá entrar y salir, y encontrará su alimento. El ladrón no viene sino para robar, matar y destruir. Pero yo he venido para que las ovejas tengan Vida, y la tengan en abundancia.»
Señor Jesús, queremos saber disfrutar la vida consiste, en primer lugar, en estar presente. Porque sabemos que es el buen pastor, sabemos que eres la puerta que queremos pasar solo por Ti. Sabemos que es en Ti donde podemos encontrar la verdadera felicidad. Saber disfrutar la vida consiste en meter a Cristo en nuestra propia vida.
Consiste en poner los cinco sentidos en las sensaciones, los colores, las palabras y las emociones. Invertir toda nuestra energía mental en hacer de cada momento algo importante. Algo que sabemos que le agrada a Dios.
Dios quiere que disfrutemos de lo que hacemos. Como el Padre bueno que se alegra cuando su hijo disfruta y va descubriendo nuevas cosas, va dando pasos en el mundo, se llena de alegría. Desde las cosas más básicas, como la alegría que un bebe descubres sus manos, o un niño que descubre el chocolate, o se sombra antes las cosas que empieza a descubrir, o como ya de mayor empieza a tener triunfos: cuando gana una competencia, o cuando se esfuerza por sacar buenas notas y lo consigue. Son detalles que alegran al Padre, hace que se alegra muchísimo. Y es lógico que pensemos a Dios, de la misma manera: Así. Por eso tenemos que aprender a disfrutar también la vida, con tan solo después de el trabajo intenso.
Aprender a disfrutar la vida
Recuerdo, era tarde, me faltaba todavía alguna persona para atender a una persona, cuando llegó me dijo, se te ve cansado. Y le respondí que era lógico estar cansado, sería “turro” llegar al final del día y no haber hecho nada. Un cura tiene que darse a los demás, y muchas veces eso es fatigoso.
Pero también hay que aprender a descansar. Aprender a disfrutar. Descansar no es no hacer nada, eso sería terriblemente aburrido (al menos yo no podría). Descansar es cambiar de actividad, hacer algo que necesite menos esfuerzo, como escuchar música con los amigos. (como contaba antes)
Eso estaba haciendo cuando tomaron esta foto, como se ve, es un momento de descanso. (lo que publiqué en Instagram)
¿Te has parado a pensar cómo disfrutar la vida con felicidad? La respuesta es muy sencilla: Dejando entrar a Jesús en tu vida. Intentándolo. Puede parecer una tontería, pero es la verdad. Cada persona busca su propia fórmula. (hay que intentar a todo, sacarle el máximo provecho) Como lo dice Jesucristo:
«Yo he venido al mundo para que las ovejas tengan vida, y la tengan en abundancia”.
Muchas veces se pierde por el camino o bien ni siquiera lo intenta. Pero yo he venido para que las ovejas tengan Vida, y la tengan en abundancia.
¿Disfrutar de la vida o tener éxito?
No tenemos que equivocarnos con la palabra éxito, que se puede definir como el resultado feliz de una actuación; con realmente disfrutar la vida, humanamente hay muchas formas de disfrutar la vida, y cuando vemos que a Dios le agrada, que aprovechemos todas las cosas para disfrutarlas, entonces empezamos a comprender el sentido de “aprender a vivir cada momento”
Reflexiona de forma personal de que forma disfrutas en tu vida, de las cosas que atienes a tu alrededor.
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- Vive, recuerda que respiras. Es importante recordar que estás vivo a cada segundo.
- Sueña, cultiva tus ilusiones. Sólo los muertos dejan de soñar.
- Comparte, no estás solo. Mucha gente compartirá tus sueños y quizás no has sabido encontrarlos.
- Sonríe, todos ganan. Cuando compartes tu sonrisa.
- Siente, muestra gratitud a la vida. Sonríe a nuevos pensamientos y emociones.
- Actúa, de forma congruente con lo que dice tu interior. Con valor, decisión y sentido común.
Sabiendo que Dios padre se alegra de todas tus victorias, Dios se alegra de todas tus luchas y Dios se alegra de tu esfuerzo por llevar la cruz. (la cruz que siempre estrá presente y, que nunca será un motivo para dejar de disfrutar la vida, porque Dios, hoy más que nunca en este momento, tal vez de tribulación por la pandemia, por el alejamiento, por el “lock down”, quiere de igual manera que aprendamos de DISFRUTAR DE LA VIDA.
Ponemos estas intenciones en las manos de la Virgen, que es la más interesada que apredamos de disfrutar de esta Vida, tal como ella lo hizo. Cuando me imagino a la Virgen, me imangino a una mujer alegre, con una carcajada limpia. No, una mujer que se pasa llorando, o preguntándose ¿Por qué a Ella?, o golpeándose en el pecho. Acudamos a la virgen que es Reina de la alegría