Al leer el Evangelio de hoy me acordaba de un video que vi hace algunos días. Un video musical en el que un cantante mítico canta una canción clásica, un clásico contemporáneo (como le gusta decir a un amigo) en un lugar hermoso.
En Central Park, en Manhattan, Elton John canta un cover, una canción original de John Lennon: “Imagine”.
Esto fue el 13 de septiembre de 1980. Unos meses después, John Lennon murió asesinado a unos pasos de Central Park.
Imagínate ese momento cuando uno ve ese video y sabe que le quedan pocos meses de vida a John Lennon y que está este gran cantante haciendo este cover con mucho cariño a su amigo y poniendo de su propia interpretación, porque es una canción que toca muy bien.
Te dejo el link por si te interesa verlo https://youtu.be/ulv5uTd-XiU
Dice cosas tan emotivas “Imagine”: “Imagínate que todos los hombres pudiéramos ser hermanos; a brotherhood of man”. Que no hubiera divisiones entre nosotros, imagínate.
Imagínalo, porque no se puede, porque siempre fracasamos. Los seres humanos siempre que queremos unirnos siempre saltan las diferencias, las guerras, el odio, la incomprensión, la intolerancia y nos acabamos “agarrando del chongo”.
La comunión que podemos establecer por nuestras propias fuerzas es débil, pero hay una comunión que no es débil. Hay una comunión que es siempre alegre, siempre gozosa, porque está fundada en el amor. Siempre luminosa, que es la comunión esencial, Dios mismo.
COMUNIÓN
Dios mismo es comunión. Padre, Hijo, Espíritu Santo, un solo Dios y ese Dios creó seres capaces de comunión. Capaces de comunión si saben amar como Dios ama.
Cuando el hombre tiene la osadía de amar como Dios ama, deja que su corazón se regenere para poder amar como Dios ama, entonces hay comunión, una comunión que es un anticipo del Cielo.
Me acordaba precisamente de esto, por una línea del Evangelio del día de hoy. “Tú Jesús estás en el Cenáculo con tus apóstoles hablándoles del Espíritu Santo que vendrá” y cuando venga el Espíritu Santo entenderemos muchas cosas.
Cuando venga el Espíritu Santo podremos disfrutar también de esa comunión. Todavía no es el Cielo, pero ya hay una comunión verdadera.
“En aquel día entenderán que Yo estoy en mi Padre, ustedes en Mí y Yo en ustedes”
(Jn 14, 20).
“Ay Señor, entenderán que ya hay una comunión, ya Dios está en nosotros y nosotros estamos en Dios. Ya estamos casi en el Cielo, pero no lo alcanzamos a entender, no lo alcanzamos a disfrutar”.
Y, a veces, incluso estamos tristes, temerosos, un poco amargados cuando Dios está en nosotros y nosotros en Dios y debemos de estar plenamente contentos y en diálogo con Él, contigo, con el Padre, con Jesús, con el Espíritu Santo.
“En aquel día entenderán que Yo estoy en mi Padre”
nos dices Jesús. Aquel día entenderán que Dios es comunión, que Dios es perfecta comunión, perfecta unión. Comprenderán también que ustedes pueden estar en Dios, participar de esa comunión.
Estamos creados para eso y solo ahí encontramos plenitud. Los seres humanos sin Dios estamos perdidos.
IMAGINE
Por eso, también esta canción es un poco patética, porque comienza diciendo: “Imagínate que no hay Cielo, imagínate que no hay religión…”
Pero ¿cómo quieres que haya comunión si te olvidas del Cielo, si te olvidas de la religión que es la ayuda que Dios nos está dando para entrar en esa comunión?
Por eso esta canción es polémica y me acuerdo -ahora me vienen a la mente- dos protestas ante esta canción.
Una es de los “Vázquez Sounds”, un grupo de música mexicano que, en una ocasión, la mismísima Yoko Ono supo de ellos y los invitó a un homenaje que iba a haber a John Lennon y les sugirieron que cantaran esta canción de “Imagine”.
Cuando la niña Vázquez vio la canción dijo: “Imagine there’s no Heaven, imagine no religion…” esto no me gusta, no me gusta que “imagínate que no hay Cielo, que no hay religión…” no me gusta eso y no cantaron esa canción.
No sé si cambiaron de canción o ya no fueron al festival, pero me gusta que se decidió, “no puedo cantar eso”. Como si fuera un anhelo el que no hubiera ese camino a Dios, que es esa mediación que Dios quiso poner en el mundo.
SÁQUENNOS DE AQUÍ
Y la otra anécdota de protesta ante esta canción la escuché en una conferencia de la psiquiatra española: Mariana Rojas que también interviene Yoko Ono y es una anécdota un poco más elaborada y muy divertida.
Porque cuando Mariana era niña, escuchó esta canción y le desconcertó también y le preguntó a su abuelo: “Oye, ¿qué onda con esta canción?” Y el abuelo le dijo: “Todo es culpa de Yoko Ono, todo es culpa de ella. Cuando ella entró a los Beatles, la cosa se rompió y luego influyó a John Lennon…”
Entonces Mariana se quedó con esa idea y dijo: “Yo me voy a encontrar con esta mujer y le voy a decir, le voy a preguntar por qué dijo esas cosas”.
Y, efectivamente, se la encontró después y le preguntó. ¿Qué dijo ella? Te dejo el link por si quieres ver la conferencia de esta mujer. Está en el minuto 39 https://youtu.be/5qD7pbw-
JOHN LENNON
Pero yo quería decirte otra cosa también acerca de John Lennon, porque lo leí en un libro de una mujer que tuvo algunas visiones sobre el Purgatorio y dice que las almas del Purgatorio le dijeron que John Lennon sí se había salvado y da las razones.
(Esto es una revelación particular que puedes no creer perfectamente, pero esta mujer es bastante coherente con todo el dogma y era una mujer bastante sincera aparentemente. Hay una entrevista que le hacen que se llama “Sáquennos de aquí” y que está también en audio en Spotify).
También habla del hombre que lo mató y por qué lo mató y luego qué pasó con él.
Todas estas cosas, como ya se nos acabó el tiempo, no te las voy a poder platicar, pero son muy interesantes y te las dejo aquí https://youtu.be/P8UNA08a3VE
Terminamos mirando a la Virgen, Madre de Dios, esposa de Dios, hija de Dios, que está al centro de la Trinidad disfrutando de esa comunión plena.
Una criatura que fue elevadísima y que nos lleva y que nos quiere atraer también hacia esa comunión.
Madre nuestra, ayúdanos a abrir nuestro corazón a la gracia del Espíritu Santo para que nos demos cuenta de esa bendición que es poder participar de la comunión de Dios mismo.