SAN JOSÉ OBRERO
Hoy celebramos la fiesta de san José Obrero. La mejor forma de empezar el mes de mayo, que le dedicamos a la Virgen. Y si mayo se lo dedicamos a la Virgen, que mejor que empezar con la fiesta de san José, que viene a ser un especial detalle de cariño con él y con nuestra Madre.
La Iglesia nos pone hoy el ejemplo de san José, el carpintero de Nazaret, que fue un modelo de trabajo para sostener su familia y para desarrollar su oficio.
Hace pocos días una chica me escribía -porque ahora, por la situación que estamos viviendo no siempre es posible ver a las personas, y muchas personas nos escriben y te preguntan cosas-, y me decía que no entendía por qué Dios había permitido que José muera antes … que había dejado sola a la Virgen durante la Pasión y Muerte del Señor, que fueron unos hechos muy dolorosos.
EL PLAN DE DIOS ES PERFECTO
Y la verdad es que, a mí, lo que me vino a la cabeza responderle fue: Los planes de Dios son perfectos. El plan de Dios es perfecto. Y fue perfecto para José y perfecto para la Virgen. Y que era mejor el plan de Dios, que el plan de ella. A veces nosotros podemos preguntarnos lo mismo.
En esta situación que estamos viviendo de aislamiento y de tener que estar metidos en nuestras casas, no podemos disfrutar del feriado del primero de mayo, algunos seguramente tenían planes que habían hecho desde hace mucho tiempo, viajes o inclusive, una cantidad de matrimonios que se celebraban en mayo, primeras comuniones, bautizos…
Y de repente todo pasa a un segundo plano. Ya no es lo más importante.
Sin embargo, en este caso también el plan de Dios es perfecto. El plan para cada uno es perfecto.
“Por eso, Señor, hoy te pedimos que nos ayudes a darnos cuenta de esta realidad, de que Tú no nos dejas solos, de que seguimos Tu plan.
Por más que nos parezca que hay otros planes mejores, por más que nos parezca que lo que nos está sucediendo no es lo más afortunado, que sepamos encontrar tu plan perfecto”.
NADIE ES PROFETA EN SU TIERRA
Hoy en esta fiesta, en el Evangelio de san Mateo que nos propone la Iglesia dice:
“En aquel tiempo Jesús fue a su ciudad y se puso a enseñar en la sinagoga de Nazaret. Y la gente le decía admirada:
– ¿De dónde saca esa sabiduría y esos milagros? ¿No es el hijo del carpintero, el hijo de José, su madre María y sus hermanos Santiago, Simón y Judas? ¿No viven aquí todos sus hermanos? ¿Entonces, de dónde saca todo esto?
Y se escandalizaban a causa de Jesús. Y Jesús les dijo: – Solo en su tierra y en su casa desprecian a un profeta. Y no hizo allí muchos milagros”
(Mt 13, 54-58).
Nosotros nos podemos encontrar en la misma situación. El mismo Evangelio nos presenta a Jesús, como el hijo del carpintero en su pueblo de Nazaret, donde se crió y donde vivió la mayor parte de los años de su vida terrenal.
NO SABÍAN NADA DE ÉL
Y a pesar de todo, la gente de Nazaret no llegó a conocer a la persona de Jesús. Se creía que lo conocían, pero nada sabían de Él. Por eso, no se podían explicar de dónde venía la sabiduría y el poder de hacer milagros.
Y nosotros, los cristianos, tú y yo, ¿conocemos realmente a Jesús? También somos de su pueblo, del pueblo de Dios, de la Iglesia, y nos podría pasar como los habitantes de Nazaret que no lo conocían suficiente…
Si de cualquier persona podemos aprender cosas positivas y buenas, mucho más podemos aprender de Jesús de Nazaret: escuchando el Evangelio de cada día, oyendo estos 10 minutos con Jesús es una forma de muchas de irle conociendo cada vez más. Es una manera de aprender muchas cosas buenas de Él. Y así es como enriquecemos nuestra vida y nuestra fe.
CONOCER MÁS A JESÚS
En este tiempo, en el que tenemos que estar alejados. Que tal vez no podemos hacer lo que teníamos previsto, vamos a intentar conocer más a Jesús, porque ése puede ser el plan perfecto de Dios para nuestra vida: conocer más a su hijo.
Dice san Pablo en Efesios:
“Bendito sea el Dios Padre de Nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales.
Cristo, según nos escogió en Él antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de Él”.
En este texto, con claridad vemos cómo Dios nos ha escogido a través de Jesucristo para que seamos santos y sin mancha.
LO REALMENTE MÁS IMPORTANTE
Si tú y yo nos ponemos a considerar cómo era nuestra vida antes de la pandemia, nos daremos cuenta de que, sin mancha, no era tampoco. Y que también, estos días nos han ayudado a profundizar y darnos cuenta de que, muchas cosas en nuestra vida tampoco eran relevantes.
Nos encontramos que frente a muchísimas cosas que antes nos parecían importantes, ahora han perdido completa vigencia. Ya no hay que correr por los extracurriculares de los hijos, ni preparar fiestas que nos daban tanta ilusión, o trabajos, proyectos y cosas, que nos parecían muy importantes…
Pero nos hemos detenido… Y estamos ahora mucho más cerca de Dios. Cada uno de nosotros ha tenido que hacer esta travesía para reencontrarlo en su interior.
“Señor, yo quiero encontrar Tu plan perfecto para mí. Quiero ser como san José, que estaba pendiente de la Virgen y estaba pendiente de su hijo Jesús. Y quiero hacer lo mismo: estar pendiente de Jesús, estar pendiente de María. Y en estos días olvidarme de mis problemas, de mis cansancios”.
“Señor Jesús, te pido que me ayudes a pasar por encima de eso, a encontrar Tu plan perfecto”.
LAS VIRTUDES DE SAN JOSÉ
San José, se podría decir, que las virtudes brillaban en él. Sobre todo, se puede decir que eran las virtudes de la vida oculta: la humildad, la pobreza, la paciencia, la prudencia, la fidelidad que no puede ser quebrantada por ningún peligro. La sencillez, la fe, la confianza en Dios y la más perfecta caridad.
Y esto es, el modelo incomparable que nos presenta en esta fiesta. Después de Jesús, es el ejemplo para seguir en la santificación del trabajo.
Por eso la Iglesia instituyó la fiesta de san José Obrero que celebramos este primero de mayo, presentándose como sublime modelo de los trabajadores manuales.
“Señor, que aprenda a descubrir Tu plan perfecto. Que no me dé vueltas a mí con las cosas que me gustan y no me gustan. Que esté de acuerdo para seguir las cosas que me mandas, aceptarlas, asumirlas y dar los pasos convenientes para ir rumbeando mi vida.
Sé que a veces me sentiré en soledad, que a veces no me gustarán las cosas, que podrán rondar en mi cabeza pensamientos un poco negativos… pero lo que hay que hacer es intentar ponerte todo delante de Ti y eso es lo que quiero hacer en este rato de oración, ponerlo todo delante de Ti, Señor, para que me ayudes a seguir tu plan perfecto”.
PROTEGER A JESÚS Y MARÍA
Eso es lo que hizo san José en su vida: seguir una vida sencilla, humilde, sin aspavientos, sin llamar demasiado la atención, pero una vida que tenía un fin concreto: Proteger a Jesús y a María.
Yo quisiera tener el mismo plan, proteger siempre a Jesús y a María.
Este mes tendremos la suerte de estar más cerca de la Virgen. Por eso es por lo que en 10 minutos con Jesús hemos pensado la posibilidad de hacer todos los días un ratito de 10 minutos en Instagram, para explicarles las devociones marianas, las Advocaciones Marianas.
Pueden encontrar en la descripción de estos enlaces para seguirlas todos los días al mediodía.
Vamos a pedirle a nuestra madre que nos ayude a vivir bien este mes de mayo, encerraditos para los que tengamos que estar encerrados, pero enfocados en los hábitos y aprender a descubrir el plan de Dios en nuestras vidas.